lunes, 4 de febrero de 2013

Los sentimientos infantiles

Hay una relacion directa entre lo que siente un/a niño/a y como se comporta.

Si se siente bien, se comporta bien. ¿Como ayudarlo a sentirse bien?

ACEPTANDO SUS SENTIMIENTOS

Aceptar sus sentimientos quiere decir intentar sintonizar con lo que creo que experimenta el/la niño/a, meterme en su piel, empatizar. No quiere decir estar de acuerdo ni en desacuerdo, aprobar o desaprobar, acertar o errar. Sólo quiere decir estar presente, acompañarlo con tu presencia plena. Nada más y nada menos. Porque somos seres independientes, capaces de tener una serie diferente de sentimientos.

Cuando no aceptamos negamos sus sentimientos. Cuando negamos los sentimientos de nuestr@s niñ@s, l@s confundimos y les mandamos el mensaje de que no l@s queremos con lo que sienten, con lo que son.

Piensa en tí como persona adulta: ¿sueles darte cuenta de lo que sientes? ¿comunicas lo que sientes a los demás? ¿qué hacen los demás cuando les comunicas tus sentimientos? ¿cómo te sientes ante sus reacciones?

Cosas que solemos hacer ante los sentimientos de nuestr@s niñ@s:
  • Escuchar distraidamente mientras hacemos otras cosas como jugar con el móvil, ver la tele.
  • Preguntar y aconsejar y de ahí al reproche no hay casi nada. Entonces la/el niña/o se indigna y nosotros a continuación.
  • Negar su sentimiento: "No...a ti lo que te pasa es que..."
  • Dar explicaciones y acudir a la lógica. ¿Qué lógica? ¿La mía o la de él? ¿Acaso es la misma?
En definitiva, lo más importante es la actitud que adoptemos porque todos los sentimientos pueden aceptarse. Para ello:
  1. Escucha con mucha atención, haciendo contacto visual, poniéndote a su altura física, dejando de hacer lo que estés haciendo.
  2. Reconoce sus sentimientos con la palabra. Puedes hacer pequeñas interjeciones como aja, vaya o ponerle nombre al sentimiento que esté experimentando, sin juzgarlo, tan sólo nombrándolo: "Vaya, veo que te sientes muy enfadado..."
  3. Concede al niñ@ sus deseos en la fantasía, como si fuera un juego.
  4. Y por último, o primero, haz una autoevaluación íntima de cuando niegas tú sus sentimientos,  cuando te dicen qué concretamente, qué es lo que no soportas que te digan, cómo sueles reaccionar ante sus emociones, qué sientes cuando ellos no te escuchan.


Para terminar os dejo este enlace de la película de Javier Fesser "Camino", gran película y que un ejemplo extremo de lo que puede significar negar lo que siente una niña o niño.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola, mi nombre es Pablo. Hablas de cosas que pocas veces nos paramos a pensar, nos comportamos inercialmente sin pensar que el guión lo podemos cambiar para crecer. Este artículo ayudará a muchas personas, entre ellas yo, a reflexionar sobre el valor de los sentimientos personales y de los niños. Felicidades, reflejas mucha sabiduría y luminiscencia. Lo comparto si no te importa.

Unknown dijo...

Hola Pablo, muchas gracias por tu comentario. La primera intencion de este post es hacer reflexionar a quien lo lea. Muchas veces no somos conscientes de nuestro comportamiento y actitudes y es preciso tomar conciencia sobre ellos para poder seguir creciendo. Gracias de nuevo, por leerme, contestarme y compartir. Mis mejores deseos para ti